Ordenador portátil con pantalla de órdenes de trabajo eMaintEntender la orden de trabajo

Un sistema de órdenes de trabajo debe establecer claramente una solución que asigne la menor cantidad de tiempo y energía a los problemas en el mantenimiento de activos. Las órdenes de trabajo individuales pueden diferenciarse en tipos a demanda o preventivos. 

Un ejemplo de "a demanda" es tener un ventilador para la circulación del aire que un día deja de girar. Por el contrario, un ejemplo de prevención es añadir aceite a un compresor de aire. En cualquier caso, tendrás que ser proactivo a la hora de detectar problemas menores que podrían convertirse en una avería grave. 

Cuando prepare las órdenes de trabajo de mantenimiento, explique detalladamente las instrucciones para sus técnicos y qué piezas de repuesto deben utilizar en los equipos afectados. Asegúrese de que toman en serio las precauciones de seguridad poniéndose los EPI antes de llegar al lugar. Si no encuentran el origen de la avería, facilíteles acceso a los manuales y documentos que revelen el estado de la máquina. 

Cómo rellenar una orden de trabajo

En general, una plantilla de orden de trabajo consta de varias partes que permiten a los trabajadores de mantenimiento redactar órdenes de trabajo auténticas y sin errores. 

Nombre del activo

Identifique el equipo sobre el que hay que trabajar. Rellene el ID del activo sometido a mantenimiento y el grado de prioridad si procede.  

Nº de orden de trabajo

Cada orden de trabajo debe tener su propio número secuencial para que el proveedor pueda seguir su progreso y ver qué tareas se han completado. 

Fecha/hora de la solicitud

Le informa de cuándo se envió la solicitud de trabajo y le da un plazo de la fecha de entrega prevista. 

Alcance del trabajo

¿Cuáles son las herramientas y piezas que utilizará para realizar el trabajo? ¿Qué habilidades y cualificaciones se requieren?

Departamento

Muestra quién escribió la orden de trabajo y el departamento desde el que se envió. 

Descripción del activo

Describir el estado actual del activo mediante lo que se ha visto, oído u olido para justificar el mantenimiento del procedimiento. 

Asignar a

¿Quién tiene un hueco en su agenda para hacer el trabajo? Considere la posibilidad de recurrir a un contratista externo si considera necesarias reparaciones especializadas. 

Realización de una orden de trabajo

El estado de un bien vigilado le indicará si una solicitud debe convertirse o no en un encargo obligatorio. Tendrá que evaluar el nivel de criticidad, el presupuesto disponible y la gravedad de un informe para averiguar lo que implica el trabajo. Asegúrate de tener una lista de comprobación exhaustiva de todos los elementos previstos para cada orden de trabajo. Una de ellas podría ser sobre mantenimiento eléctrico, para que el mecánico pueda detectar una caja de disyuntores defectuosa o un generador apagado. 

Lo importante es asegurarse de que su equipo cuenta con los conocimientos y el equipo necesarios para hacer frente a cualquier tipo de situación que pueda interrumpir la infraestructura clave de su organización. 

Función de orden de trabajo

Las órdenes de trabajo son documentos que autorizan las tareas que deben realizar el personal de mantenimiento, los inspectores de planta, los contratistas generales o los servicios de campo. La mayoría de los fabricantes las utilizan para averiguar la causa raíz tras una auditoría rutinaria. No hay que confundirlas con las órdenes de compra, en las que se contabilizan los costes de los bienes y servicios prestados por proveedores externos. 

Son un método eficaz para recopilar datos sobre el uso de los recursos de mano de obra o piezas. Además de obtener diversos indicadores de fallos, puede planificar con antelación restauraciones y sustituciones de emergencia mediante medidas correctoras. 

Gestionar órdenes de trabajo 

La mejor forma de implantar un sistema de gestión de órdenes de trabajo es utilizando PNT designados para cada tarea. Está diseñado para procesar grandes volúmenes de solicitudes mediante la normalización de los formularios con un documento adjunto para ayudar a conservar datos precisos. 

Los seis pasos del flujo de órdenes de trabajo pueden resumirse así:

  1. Identificación de tareas
  2. Creación de órdenes de trabajo
  3. Aprobación de órdenes de trabajo 
  4. Asignación prioritaria
  5. Distribución y ejecución
  6. Documentación de resultados 

Para flujos de trabajo complejos, lo mejor es gestionarlos a través de una GMAO que venga instalada con una aplicación de programación de órdenes de trabajo. 

Aplicaciones de órdenes de trabajo

Una GMAO hará que el proceso de órdenes de trabajo de mantenimiento sea pan comido al mantener registros de su historial acumulado de mantenimiento y reparaciones para que todos los usuarios reciban la misma versión de esos documentos. El software utiliza la computación en la nube para dar soporte a las comunicaciones directas entre los miembros del equipo en un portal central donde las solicitudes de los técnicos se envían a través de formularios personalizados para automatizar la programación de los PM. 

Muchas aplicaciones de órdenes de trabajo son accesibles tanto desde ordenadores de sobremesa como desde dispositivos móviles, por si los técnicos están reparando equipos pesados o inspeccionando signos de desgaste. Y no solo eso, también obtendrá información sobre sus operaciones gracias al seguimiento en tiempo real del estado de los activos, que alerta a toda la planta de las tareas que deben revisarse. 

Sobre todo, realice un seguimiento del resultado de las órdenes de trabajo aprobadas midiendo aspectos como la eficacia general de los equipos para alcanzar los objetivos de mantenimiento de su planta.